Engañas o te engañan

Está visto que vivimos en una sociedad de pillos, donde puedes sucumbir al tramposo o caer en las garras del audaz: Pero la supervivencia sólo se consigue actuando como uno de ellos, siendo deshonesto contigo mismo, pues la clavas o te la clavan.
Te vas a comprar un piso y las opciones de que te estafen son infinitas. Abres una cuenta bancaria y ya no digamos un fonde de pensiones...y las posibilidades de que un madoff cualquiera se lo lleve crudo son elevadas...Por eso hay que engañar a los bancos y decirles que no quieres nada de ellos.
Lo mismo pasa con la esposa, con el jefe en el trabajo, con la familia...se acabó la ética de la generosidad: primero yo, luego yo y en último lugar yo.
Menos mal que al final, despiertas de la pesadilla y te das cuenta de que todo es una gran mentira, pues ni los políticos nos dicen la verdad sobre la crisis, ni los empresarios aplican las medidas restrictoras sobre los precios, sólo sobre los sueldos, pero ellos sólo pagan cuando el timador es más listo que ellos, como el citado Sr. Madoff, que alcatraz le tenga en su gloria